37. CHIA JEN. El clan

1) Este hexagrama representa la estructura de un grupo jerárquico, de un clan o familia, y sitúa al consultante en una de las líneas, todas las cuales representan cada uno de los órdenes naturales de los lazos en la familia. Si el consultante es varón, su Misión de vida consiste en consolidar los lazos de unión y de mutuo entendimiento entre los integrantes de un equipo, equipo que, o bien ya integra o pronto habrá de integrar, y que tiene extrema gravitación sobre su proceso de vida. Cuenta para ello con el poder que aporta un influjo persistente en la acción ejemplarizadora y en el seguimiento del Orden Natural. De ser mujer quien realiza la consulta, su Misión de vida tiene que ver con la consolidación de los lazos dentro del grupo o equipo, a través de la persistente entrega y lealtad, contribuyendo desde su capacidad natural para el afecto y la armonización, a la consolidación del proyecto común. Desde la perspectiva del alma, esta etapa tiene que ver con un aprendizaje que no debe ser postergado y que consiste en la experiencia de pertenencia a un cuerpo colectivo, sea una institución de Hermanos o una familia constituida. No es asunto baladí, desde el punto de vista de los objetivos que se procuran a través de un nacimiento bajo esta configuración; El experimentar con los lazos internos, sus reglas y grados, en el marco de un equipo o grupo familiar, puede contribuir a que logremos visualizar con claridad el espíritu de Fraternidad que rige enteramente y de hecho en el plano de las almas. En el plano de la Unidad de la consciencia, las unidades espirituales laboran concertadamente y adquieren el conocimiento por fusión (por Amor). En sentido análogo, en el plano material ha de desarrollar el alma un gran esfuerzo para vivenciar los mismos principios que en el plano de la Realidad vive en su mancomunidad o experiencia de Unidad con todas las almas. La Fraternidad de todas las criaturas constituye una premisa superior de vida, y es el postulado al que todos los aspirantes debieran elevar sus miras.

2) Como se sugiere en el numeral anterior, te encuentras en un momento clave de tu desarrollo: pronto te has de incorporar a un grupo con líneas vinculares sólidas, con reglas internas bien escuadradas y con «rituales» propios de su naturaleza operática. Sea el grupo que sea, no olvides ofrecer tu leal contribución, ya sea en el carácter de líder o cogestor, como en el de dependiente o adherente. Puedes estudiar los Tratados de Caballería y todo lo concerniente a esas órdenes antiguas de entrenamiento moral. Asimismo puedes encontrar mucha inspiración en el abordaje regular de los grados en las órdenes Francmasónicas. Quizás se trate de ese tipo de vínculo con organizaciones de carácter jerárquico. En todos los casos aprovecha esta oportunidad que te ofrece la Vida para trabajar en equipo, para concentrar tus mejores empeños en los beneficios de la totalidad. Grandes bendiciones sobrevienen sobre las almas impuestas de este especial encuadre existencial.

3) El excesivo individualismo, la falta de perspectiva de trabajo en cooperación, la tendencia a la adulación o a la envidia, la maledicencia y el rumor, son todos desafíos, grandes desafíos que las épocas en que vivimos han reforzado y que bloquean la calidad de los vínculos entre los distintos niveles de una organización. Recuerda que todas las organizaciones siguen el Paradigma Jerárquico, el paradigma de la Jerarquía Oculta, lo sepan o no. En todos los reinos y principalmente en el humano, con la emergencia de las influencias del Séptimo Rayo, sobreviene siempre una búsqueda de la perfección en la organización y en el Orden. El modelo subjetivo (subconsciente) es el de la Jerarquía Oculta. Examina al respecto la obra «Los Maestros y el Sendero» de Charles W. Leadbeater, e intenta extrapolar a tu ámbito de pertenencia el perfume de la mayor organización o clan espiritual en la Tierra.

4) Espíritu de equipo, considerarte un dedo entre otros de una mano, interés real y sensible por el avance y el progreso del organismo colectivo dentro del organismo social, nacional y planetario. La Teoría de Sistemas abona esta práctica de ir progresando en los distintos niveles del orden, a partir de las áreas en que puedas avanzar de uno a otro de manera natural. Tu propia familia, tu nación y el planeta son, en síntesis, los niveles fundamentales de trabajo (los tres grados). Pero también lo son: la Escuela de vida a la que te adhieras, el ashram del Maestro al que tarde o temprano habrás de incorporarte y la Jerarquía Planetaria, dentro del Gran Concilio de Shamballa (los Tres Grados esenciales). Puedes leer al respecto «Shamballa» de Vicente Beltrán Anglada e informarte sobre este estado del alma común que supervisa todos los esfuerzos espiritualizadores en el seno de la Humanidad.

5) «Soy uno con Todos. Cada uno de mis camaradas es uno conmigo. Aquello que nos hace tan diversos, nos vuelve más poderosos. Somos una totalidad plural y única. La característica del conjunto es que está edificado a imagen y semejanza del Todo Mayor. Esta es la Ley y el Orden en este reino y en el reino del espíritu».