1) Estás señalado para reunir a los hombres, para hacerla s coincidir, para dar directivas y trazar líneas de acción que sirvan a los efectos de establecer una comunidad en paz y conforme a leyes superiores. Pero antes de emprender cualquier iniciativa en este sentido, asegúrate de que cuentas con los elementos de juicio, con la aptitud necesaria, y que las condiciones externas son las adecuadas para realizar tu plan. Para eso una y otra vez trata de consultar el Tratado antes de tomar una decisión, a fin de evitar que, debido a tu inseguridad, a tu falta de experiencia y de consecuencia, incurras en excesos o en defectos. La unión de los hombres, la armonización de las partes, la conciliación, el entablar y conducir acuerdos, es una tarea para grandes hombres. Si no estás a esa altura procura por lo menos ser un modesto colaborador que propenda siempre a la comunión de ideas y de intereses.
2) Estás pronto para pasar a la acción en el terreno social y comunitario. Se requiere de ti que investigues en los principios de la vida de Servicio (propios del discípulo) para detectar y extraer todas las pautas aún inseguras que puedas tener respecto al orden común. Si estás designado para tener un papel director en la grey social, antes de dar ningún paso deberías confiar tus propios proyectos a la luz del sentido común y encontrarte con el justo momento y con la oportunidad propicia. Es tiempo de que te intereses por el Karma Yoga, el sendero del hombre de acción. Se insiste en la Tradición en la necesidad del desarrollo del Servidor, para que su tiempo y oportunidad coincidan con las necesidades del mundo.
3) Como resultado del examen de consciencia que se te hará imprescindible antes de intentar algún paso en relación con la concertación de cualquier grupo humano, se presenta el problema de la inseguridad, de la falta de cohesión interna, de temer no contar en uno mismo con la fuerza suficiente como para asumir responsabilidades mayores. Y son estas debilidades de carácter, la falta de valor y coraje, de tenacidad para llevar a cabo las empresas que uno patrocina, los principales obstáculos en esta posición en que, si bien se presenta una oportunidad para contribuir con un nuevo ensamblaje de las piezas del rompecabezas social, también el íntimo disturbio y la inconformidad podrían provocar un desorden aún mayor al que se intenta reparar. Evita involucrarte en actividades para las que no te sientas acondicionado y trata de colaborar con los demás, propiciando siempre un entendimiento en niveles cada vez más inclusivos, ofreciendo tu propia inspiración y tu energía para propiciar un digno entendimiento en el nivel material.
4) En principio la Tradición habla simbólicamente de organizar las fuerzas en nuestro interior, de darle a cada una su lugar, su envergadura, su importancia. No es deseable dar curso a aspectos remanentes de la personalidad que deben permanecer sometidos por otros superiores. De modo que, trabaja sobre tu naturaleza emocional y moral desde el faro de la razón, y de esa manera alcanzarás a dirigir tu energía y tus fuerzas en la correcta dirección. Ten presente que el organismo social es una proyección de cualquier tipo de organismo, de toda entidad viva, y que sus leyes también son las leyes de la naturaleza. Concibiendo a la comunidad como una entidad viva que necesita de una cabeza, de un corazón, de unos brazos y manos y de unas piernas y pies, y unificando el organismo total, se hace más factible el éxito. Ofrece oportunidades de servicio a quienes deseen colaborar y desarrollarás potencialidades que aún no conoces en ti. Siempre consulta el texto antes de cualquier iniciativa. Puedes leer «Tratado de Magia Blanca» de Alice A. Bailey, un libro escrito para el discípulo que debe aprender a conquistar su naturaleza emocional y a servir al bien común.
5) «Un rey que ama a su pueblo es uno con su pueblo. Un rey que protege a su pueblo, es el primero de los vasallos y el último de los poderosos».