El arcano de La Sacerdotisa, de La Papisa de la maga, de la hechicera, de la adivina, de la mujer sabia, de la bruja, etc. señala y prudencia, discreción, inteligencia, conocimiento interior, sabiduría, estudio, cultura, cordura, sentido común, equilibrio entre dos tendencias, altos ideales, vivencias interiores conocimiento firme y sereno, inclinaciones místicas, espirituales, religiosas u ocultistas, búsqueda de lo conveniente y mesurado, la memoria interior o conciencia, donde todo queda registrado y memorizado.
Según el tipo de Tarot, la figura de La Sacerdotisa o La Papisa sostiene un libro (simbolismo de El Libro de la Sabiduría o de los libros sibilinos) o un pergamino con los antiguos secretos o fórmulas mágicas, que señalan el camino del conocimiento interior y del dominio de las circunstancias o mundo exterior. Por ello es una carta que marca los deseos de hallar solución a un problema, propósitos ocultos o segundas intenciones que hay en toda situación o actuación.
Quiere decir que se necesita intuición, discreción y sentido práctico para resolver cualquier problema o conflicto, rehuyendo peleas, enfrentamientos. Violencias…
Por encima de todo, La Sacerdotisa es pacífica y pacificadora, ya que con su sexto sentido y sabiduría interior puede obtener lo que desea sin necesidad de agresiones o violencias.
En muchas ocasiones, además, representa la utilización de las artes mágicas u ocultas para obtener lo que se quiere; en tales circunstancias, el arcano se convierte en La Maga, La Bruja, La Adivina, La Sibila, etcétera.
En la mayoría de Tarots. La Sacerdotisa sostiene dos llaves en su diestra, lo que significa las claves para aunar o armonizar las tendencias del inconsciente y del consciente, buscando el equilibrio de la personalidad y de sus actuaciones. Y, por extensión, esas llaves simbolizan los conocimientos y sabiduría personales que permiten encontrar la clave o solución a cualquier problema o conflicto.
La cortina que se halla detrás de La Sacerdotisa representa la unión en un todo (en una sola pieza o personalidad) de las tendencias que emanan de la izquierda y de la derecha y que, al mismo tiempo, señalan la discreción, lo que está oculto, lo que no se ve a simple vista. Incluso señala que, cual velo, hay que saber tapar, cubrir u ocultar lo que los demás no están preparados aún para ver. De ahí que, además de la discreción, sea una carta que indique el peligro de que se revele algún secreto o intimidad que perjudique a alguien.
También quiere decir que se tiene que ir con cuidado con lo que se dice y explica a los demás, ya que la indiscreción puede traer disgustos inesperados.
Muchos Tarots (los más correctos y profesionales) muestran, por añadidura, dos columnas, entre las cuales pende dicha cortina o velo. La columna de la izquierda (a veces pintada de rojo) simboliza las pasiones del inconsciente, la oscuridad, mientras que la columna de la derecha representa la sensatez, el raciocinio del consciente, es decir, son los opuestos que deben equilibrarse.
Para Jung, La Sacerdotisa es el «ánima» o elemento femenino en la personalidad del hombre. Es el naipe que representa, muchas veces (según el tipo de tirada o juego) a la consultante, a la madre.
Asimismo, este arcano significa lo misterioso y esotérico, la intuición, la paciencia femenina, la ayuda que puede recibirse de los demás (sobre todo de mujeres), las fuerzas ocultas de la naturaleza, los misterios y secretos, la ciencia, los estudios que sigue la consultan te, la pedagogía, la psicología, el psicoanálisis, el naturismo y medicinas alternativas, las facultades psíquicas, las paraciencias, la reserva y meditación, la filosofía, la capacidad para el estudio, la adquisición de nuevos conocimientos …
El pergamino o el libro que sostiene con su mano izquierda señala el peligro de que se revele algún secreto o que la consultante sufra un perjuicio a causa de escritos o documentos extraviados o no registrados oficialmente.
En otro plano, representa a la mujer religiosa y mística, más espiritual que materialista, más conformista que ambiciosa, más idealista que interesada.