Todo lo que viene a continuación es el fruto de una breve investigación basada sobre trabajos de otros, mencionados en la bibliografía, que al no ser exhaustiva seguramente presenta lagunas e imperfecciones y debe ser entendida solo como un apunte para inducir al lector, si está interesado, a profundizar sobre el tema.
En general, cuando en un tema natal un planeta se presenta retrógrado indica una atenuación de sus efectos y por lo tanto un efecto tardío cuanto menos, ya sea por aspectos o por posición. Respecto al significado kármico, indican la repetición de una lección o de experiencias vividas mal, que no han llevado a satisfacer el programa inicial de la reencarnación o del conjunto de encarnaciones de las que se proviene.
También el número de planetas retrógrados en un mismo tema natal es un índice de la ancianidad de la entidad encarnada.
Los planetas retrógrados y el Karma
El planeta retrógrado, desde el punto de vista del karma es un efecto. Se hace necesario, entonces, si se tiene un efecto, buscar e indagar acerca de sobre causa. La causa, o mejor dicho, las causas radican en nosotros mismos, en nuestros comportamientos, en nuestras elecciones, hechas tal vez en otras vidas.
Y, tales efectos, provenientes de decisiones, hechos, omisiones, vistos come causas, no se solucionan, ni de modo gordiano, ni haciendo regresiones prenatales que llevan ni se sabe donde, pero en primera instancia yendo al astrólogo kármico para tener indicaciones en línea d e máxima y después tomando conciencia en sí mismo, de sí mismo y de sobre puesta en juego para después comprender como deshacer los nudos: con inteligencia, perseverancia y amor. Un trabajo tal no disolverá quizá todos los nudos (léase el karma) pero al menos no añadirá más posteriormente.
DIFERENTES TIPOS DE KARMA
Karma positivo:
Es un karma de mérito, que forma parte de energías bien utilizadas en el pasado o en vidas precedentes. Tales energías son benéficas y pueden conducir a optimas realizaciones, optime elecciones, y por lo tanto ayudar a la reorientación si es necesario y a la salida del programa. Algunos planetas retrógrados tiene tal acción: los que forman aspectos de sextil o trígono con otros planetas o entre ellos mismos. En este caso, forman parte de un karma de retribución positiva. La acción del planeta está fuertemente velada por la inconsciencia, pero la energía en juego puede producir efectos positivos si el sujeto decide trabajar seriamente sobre sí mismo. Debe comprender como el comportamiento daña a los propios objetivos. Cuando el planeta se pone directo, si se pone, liberará los efectos esperados. Pero es necesario recordar que trabajando con el karma y sobre el karma no se trabaja por una recompensa, al contrario, los resultados se obtienen bajo el impulso del deseo que a su vez será productor de otro karma. Se continuará a girar en torno al fuego fatuo del propio egoísmo.
Karma negativo:
Si en caso contrario los planetas tienen aspectos negativos, oposición, cuadratura, sesquicuadratura (135°) o quincucio (150°), se tratará de karma de retribución negativa: el sujeto no consigue evitar las consecuencias de la oscuridad más negra en torno al planeta en examen, viene preso en la trampa kármica que otras veces, tal vez, ha preparado para los otros, se debate, pero no hace más que enredarse siempre más en la maraña que trata de desenredar. El sujeto puede llegar a decir que es víctima del destino y intenta de arrojar hacia el mundo sus propias culpas, creando así nuevo karma, presentando su propia dimisión ante sí mismo y sus obligaciones en lugar de responder con un acto de servicio y humildad.
Karma de obligación:
Este tipo de karma es a menudo puesto en evidencia por los aspectos de 36, 72, 80 y 108 (decil, quintil, binovil y tridecil). Se trata de un karma específico de un sector de vida, quedando libres los demás sectores. Tal obligación se refiere la mayor parte de las veces a un miembro de la familia o a una pareja. Tal karma se crea en otra vida, tal vez con otra persona. En esta vida no habrá elección posible: se deberán llevar a cabos las experiencias necesarias para disolver ese karma. Normalmente tales recaídas deben ser aceptadas, en caso contrario, se repetirá de nuevo la lección en la próxima vida.
Karma en suspensión:
Este tipo de karma está ligado a los planetas que retrogradan durante el curso de la existencia y puede tanto de obligación como de retribución. Tal tipo de karma no es visible en el tema natal y se pone en evidencia mediante los tránsitos, más específicamente con el Nodo Lunar Norte, o a través de las progresiones del tema natal, al inicio de la retrogradación del planeta en una específica Casa natal. Se puede decir que esta retrogradación es la manifestación kármica que hace suponer una predestinación del ser a sufrir reveses sociales, profesionales y personales en modo de disolver tal karma en vida.
Karma de agresión:
Está ligado a los Signos zodiacales Cardinales (Aries – Libra y Cáncer – Capricornio) y a los planetas Marte y Plutón. Corresponde a todas las formas de agresividad ejercida sobre los otros, a la mala utilización de la energía en el plano material (sexual, racismo, problemas de pareja, tiraría, intolerancia, etc.). Cuando se tienen aspectos de oposición, cuadratura, o una combinación de ellas, es decir una T cuadrada o una Gran Cruz, donde están implicados los Signos Cardinales, querrá decir que en las precedentes existencias se han desarrollado las cualidades negativas en detrimento de los otros, lo cual ha creado este tipo de karma. Las posiciones de Marte y Plutón en Casas y Signos podrán representar, respectivamente, una clave de lectura y canalización de la energía bloqueada. En esta existencia se tiene la oportunidad de llegar al equilibrio llevando a cabo el propio deber sin recompensa alguna, compensando pues con un karma positivo de servicio y de devoción.
Karma de posesión:
Está ligado a los Signos Fijos (Tauro – Escorpión y Leo – Acuario) y a la pareja Venus – Neptuno, correspondientes a todas las formas de posesividad en las relaciones con las personas o las cosas. Representa entonces, los desequilibrios emocionales, los deseos y las pasiones mal llevadas, el orgullo, el egocentrismo y todo lo que tiene que ver con sexualidad poder y dinero. Si se tienen aspectos de oposición, cuadratura, o una combinación de ellas, es decir una T cuadrada o una Gran Cruz, donde están implicados los Signos Fijos, querrá decir que en las precedentes existencias se han desarrollado las cualidades negativas, en detrimento de los demás, cosa que ha creado este tipo de karma. Las posiciones de Venus y Neptuno en Casas y signos podrán representar, respectivamente, una clave de lectura y canalización de la energía bloqueada. La palabra clave de liberación de tal tipo de karma es: libertad, dada a los otros y… ¡obviamente no retribuida!, servicio para los otros gratuito y sin afecto por su parte.
Karma de ignorancia:
Está ligado a los Signos Mutables (Géminis – Sagitario y Virgo – Piscis) y a la pareja Mercurio – Urano, corresponde al mal uso de la comunicación y del Conocimiento para fines egoístas, incluidas las traiciones a todos los niveles. Cuando se tienen aspectos de oposición, cuadratura, o una loro combinación, o una combinación de ellas, es decir una T cuadrada o una Gran Cruz, donde están implicados los Signos Mutables, querrá decir que en las precedentes existencias han sido desarrolladas las cualidades negativas, en detrimento de los demás, lo cual ha creado este tipo de karma. Las posiciones de Mercurio y Urano en Casas y Signos podrán representar, respectivamente, una clave de lectura y canalización de la energía bloqueada. En esta vida se puede reequilibrar, desarrollando una actividad de comunicación y Conocimiento al servicio de los otros, y obteniendo a cambio dificultades para ser comprendidos, estafas, caídas psicológicas, enfermedades de los nervios etc.
PLANETAS RETRÓGRADOS
Mercurio Retrógrado:
Mercurio retrógrado indica dificultades de comunicación o modo poco práctico de afrontar la vida. El sujeto es nervioso o inestable, tiene siempre necesidad de moverse, las vidas precedentes han sido vividas modo caótico, sin organización, sobre todo mental. En esta vida, debe aprender el orden, la disciplina y debe ponerse y perseguir objetivos precisos y en modo cuidadoso y metódico. Siendo Mercurio, un planeta «veloz», mediante las progresiones se puede verificar cuando se pondrá directo y al aproximarse o en la fecha de ponerse directo el bloqueo debido a la retrogradación de mercurio se superará.
Venus Retrógrado:
Venus Retrógrado es indicativo de una vida afectiva difícil. El sujeto es llevado a actuar de manera contradictoria con la pareja. Por un lado intenta programar la relación de manera exigente, del otro reacciona del modo contrario a lo programado, existe entonces una desarmonía de fondo entre los objetivos amorosos y el modo de vivir el amor y los afectos. La falta de seguridad interior impide al sujeto relaciones serenas con el sexo opuesto, también a causa de una soledad afectiva interiore; viene por lo tanto sometida a una tensión tal en las relaciones afectivas que al final, este sujeto se bloquea a sí mismo y a sus propios sentimientos. Venus retrógrado indica un karma muy pesado en el ámbito afectivo: el sujeto no había comprendido mucho del amor en las vidas precedentes, el comportamiento inadecuado le aportará muchos sufrimientos. En esta vida, el recuerdo de aquel dolor les impide poderse dar completamente. A veces, e los hombres más que en las mujeres, Venus retrógrado indica tendencias o comportamientos homosexuales en la vida precedente, la sospecha de infidelidad y de intereses egoístas anida en sus mentes y esto los lleva a rechazar incluso la idea del amor. Cuando Venus retome el movimiento directo, el sujeto mejorará sensiblemente su vida afectiva. Lección Kármica con Venus Retrógrado: Amar o intentar amar sin apegos y sin posesividad.
Marte Retrógrado:
Marte Retrógrado indica un mal uso de la energía en las vidas precedentes. El sujeto tiene graves problemas al adaptar su comportamiento como respuesta a las situaciones que la vida le pone: emplea demasiada energía y de modo puntual e impulsivo, creyendo encontrarse de nuevo en viejas situaciones en las cuales se debió defender porque lo atacaban. En esta vida tiende a exteriorizar las cualidades negativas de Marte: mejor la muerte hoy que sufrir mañana, o bien impulsividad, violencia, cólera, sexualidad agresiva. El sujeto debe aprender en esta vida a vivir aquí y ahora y debe tratar de totalizar las energías a su disposición poniéndolas al servicio de los otros en modo da digerir una parte del karma negativo, utilizando mejor las energías físicas y vitales que la Entidad tiene a su disposición en esta encarnación.
Júpiter Retrógrado:
El significado principal de Júpiter es «expansión», de esto deriva el sentido práctico, la fe, la confianza, las riquezas, la fortuna y la felicidad. Un Júpiter retrógrado indica que la Entidad no ha sabido usar, o ha usado mal o para fines egoístas una o más de una de las cualidades citadas en las vidas precedentes. Las vidas precedentes, entonces, han sido vividas en el despilfarro o en la escasez y no han aportado los frutos previstos, o aún peor, la persona ha rechazado los sacrificios para la salida del programa, con lo que no se ha dado ningún progreso. Es necesario, en esta vida, recomenzar todo desde el principio.
Saturno Retrógrado:
Saturno, según algunos autores, es considerado el Señor del Karma, con lo que, cuando está retrógrado señala pesadamente uno o más sectores vividos por el sujeto en los cuales no va a haber evolución, al contrario, esos ámbitos son los que han sido más veces propuestos y ya han cristalizado.
En esta encarnación, la Entidad se los reencuentra frente a frente para resolverlos en términos de responsabilidad. Saturno retrógrado, entonces, representa un karma que viene propuesto de nuevo una vez más, en cuanto la Entidad ha tenido otras ocasiones para resolverlo, pero no ha encontrado el coraje para liquidarlo y esta vez el alma sentirá un gran peso, se sentirá anclada, atada desde todas las partes y sobre todo debe aprender la lección y resolver. Se repiten las clases y las en lecciones que no han sido aprendidas, ¡se parte de cero!
El sujeto que posee esta configuración planetaria es un alma vieja que ha adquirido mucha sabiduría a través de los siglos y las vidas precedentes. Habiendo ya experimentado tanto el derroche como la futilidad sabe apreciar lo que recibe y toma esta encarnación muy seriamente. La Entidad debe concentrar, come bien sabe hacer, todas las fuerzas para llegar a cumplir su deber.
Urano Retrógrado:
Este planeta indica el espacio y en particular el espacio interior. Este espacio, en cierto sentido, representa la libertad divina que se da a cada Entidad y sin la cual no es posible expresar Amor. El nativo con Urano retrógrado tiene siempre la sensación de falta de espacio, tiene siempre miedo de estar obligado, sofocado, bloqueado, limitado. Revolucionario, de manera sistemática, contesta cualquier forma de jerarquía y de autoridad. No se le puede obligar a hacer de secundario de nadie, o utilizarlo como subordinado. El karma indica que debe ser un símbolo de libertad para los que se comportan como borregos, siempre presos del miedo.
Neptuno Retrógrado:
El influjo general de Neptuno está, a veces, mal interpretado y esa mala interpretación se agrava cuando se lo clasifica entre los maléficos. En realidad Neptuno juega un grande rol en la liberación de las deudas kármicas. Tendiendo a disolver el ego y por lo tanto, las ilusiones a las que el sujeto se había apegado, no hace otra cosa que despegarlo de las apariencias y de las cosas de este mundo: la Entidad se desembaraza de los falsos valores heredados en sus vidas precedentes. Por otra parte, Neptuno es el planeta del olvido que permite el perdón, la lección kármica neptuniana: ¡olvidar para perdonar!, y por lo tanto, permite a la Entidad tomar distancia de las cosas para poder sintonizar con el cosmos y con las leyes divinas. Cuando Neptuno está retrógrado y mal aspectado la Entidad soporta mal el peso del duelo terreno y tiende a refugiarse en las drogas, el alcohol, el sexo, las evasiones místicas. Un Neptuno retrógrado, para algunos autores, indica un alma que ha vivido, al menos, una vida precedente en la Atlántida, hace10-12.000 años.
Plutón Retrógrado:
Plutón por su naturaleza es un significador kármico: es portador de información sobre las vidas precedentes y indica en esta encarnación, los cambios de dirección, las transformaciones dolorosas y radicales que deberá sobrellevar la Entidad para una reorientación hacia las nuevas exigencias espirituales. Indica la posibilidad del crecimiento del alma.El sujeto se verá obligado por los sucesos de su vida a transformarse: la muerte (real o simbólica) de personas, ideas y cosas en que cree lo llevará a la transformación que le dará acceso a un estadio superior.
Los nodos Lunares
Los nodos son los puntos del cielo definidos por la cruz que forman la trayectoria aparente del Sol alrededor de la Tierra y la de la Luna siempre en torno a la Tierra. El eje que conjuga los dos nodos (del Sur al Norte) indica la Vía que la Entidad ha escogido seguir para llevar a cabo su programa. El nodo Sur recoge en sí las experiencias de las vidas precedentes, el Norte indica el fin que persigue en esta vida para ejecutar el programa escogido o aceptado. El nodo tiene un ciclo de 18 – 19 años, esto significa que cada 18 – 19 años el sujeto tiene la ocasión de renacer y de aportar las correcciones en la puesta en funcionamiento del programa o de aligerar los aspectos negativos del karma. Es necesario tener presente que en el Nodo Norte están abiertas todas las posibilidades, al contrario en el Nodo Sur se imponen las condiciones que si llaman: inercia, apego, rechazo, debilidad. Es por lo tanto evidente que si el Karma es demasiado pesado, podría no ser suficiente una sola vida para disolverlo completamente, si, en caso contrario, no es demasiado denso, con el ejercicio del equilibrio energético, haciendo fluir las energías entre los polos opuestos, podrá disolverlo. Todas las oposiciones planetarias que implican o no un retrógrado, indican una tensión energética que debe ser liberada, haciendo fluir energía. Del mismo modo esto puede ser activado entre el Nodo Sur y el Norte: utilizare positivamente esto que se pone a disposición por el Nodo Sur para llegar al Norte que debe funcionar como activador y como conductor. Pero si se invierte la circulación de energía si desploma en sí misma, en las propias costumbres, en lo ya vivido, en el apego, en la posesión y…. ¡se repetirá una vez más la lección, con una deuda kármica mil veces más pesada! Esto significa que es de vital importancia comprender el significado de los nodos Lunares en los Signos y en las Casas. Recordamos, finalmente que el uso de energía se deja como libre albedrío (¡tal vez!) . Por otra parte, la energía primaria que podemos utilizar activando ciertos polos planetarios es un poco como un cuchillo: no es ni «bueno» ni «malo», es el uso que hace el hombre lo que lo convierte en «bueno» o «malo» La Luna negra o Lilith La Luna negra es el segundo foco de la elipse teórica diseñada por la Luna en su recorrido alrededor de la Tierra, tiene un periodo de evolución zodiacal de alrededor de nueve años. Simbólicamente representa la cara oscura de la Luna, es decir, la que se permanece siempre escondida a los ojos de los humanos. Hay dos formas de interpretar la Luna Negra: uno de tipo genetliaco, el otro de tipo kármico. La interpretación ordinaria está ligada a la sexualidad y a la sensualidad, en cuanto Lilith o luna infernal era la primera mujer de Adán. Lilith no procreó, representaba solo el Sexo por el Sexo y por eso mismo fue arrojada en el Mar Muerto a unos 328 metros bajo el nivel del mar y 962 metros bajo el nivel de Jerusalén. No es por nada, pero en el Mar Muerto no se da forma alguna de vida. Sin embargo, los fangos que se extraen del fondo son potentes estimulantes sexuales. Además, en el Mar Muerto la densidad salina es tan elevada, unas 5 veces más que la media marina, que hace que la sal no se hunda, y que se encuentren bloques de sal flotantes. Esto viene a decir: conservación, cristalización y purificación. La Luna negra es similar a los Nodos: contiene en sí el programa a realizar, se apega a los instintos que están a su vez profundamente anclados en el fondo de nuestro inconsciente para obligarle a evolucionar. Nos hará vivir situaciones que no conseguiremos controlar y que por lo tanto deberemos sufrir. Estaremos obligados a hacer frente a problemas no perceptibles hasta que sucedan, y no controlables mientras se desarrollan. La mente no podrá ejercer ningún poder sobre ella y sobre lo que ella supone. La mente en cuanto a la Luna negra hace olvidar de una vez para otra, o incluso de una vida a otra, las lecciones impartidas y no asimiladas. Es activa para hacer vivir el día a día, instante a instante, o mejor dicho, el aquí y el ahora. Si se está imposibilitado para programar, razonar, controlare y se puede solo sufrir. Al ser puestos frente a nosotros mismos, no se puede y no se debe hacer trampas con uno…. so pena de la caída en la oscuridad más absoluta…. Casi la de la muerte. Lilith sugiere, manda, impone comportarse de un cierto modo y si se la vive mal, oponiéndose a ella, se corre el riesgo del bloqueo de las energías. Por tanto, no se pueden corregir las dificultades del Signo donde se encuentra Lilith, se estará obligado a dejarse llevar y a adaptarse día a día a eso que nos somete. Pero Lilith cuando pone obstáculos, lo hace para salvaguardarnos del mal, de hecho se convierte en un ángel de la guardia que teniendo el conocimiento del nuestro pasado kármico y de nuestros errores, actúa de modo en que seamos bloqueados antes de actuar de modo negativo ya sea respecto a nosotros mismos o respecto a los otros. Por Andrea Biondo.
Fuente: http://www.cidacatania.it/articoli.asp?id=69